Los desafíos del nuevo presidente de México: Transporte como mitigante de la pobreza
México es una república federal democrática. Consta de tres poderes del estado, el ejecutivo, el legislativo y el judicial. Sin embargo, por más de 71 años México fue controlado por un partido político ,el Partido Revolucionario Institucional (PRI), a nivel nacional y en una gran porción de los niveles estatales y locales. En el año 2000,en lo que se considera por muchos como la más libre y justa de las elecciones ,Vicente Fox del Partido Acción Nacional fue electo presidente y puso fin a los 71 años de gobierno y control del PRI. En el año Felipe Calderón resultó victorioso y asumió la presidencia el 1º de Diciembre del 2006.En su campaña el prometió acabar con la evasión fiscal, la corrupción y la pobreza. Sin embargo, a pesar de los cambios a nivel ejecutivo, el PRI aún permaneció con una fuerte presencia en la política mexicana.
En las recientes elecciones nacionales que tuvieron lugar en julio de 2012 y como era de esperar la candidatura presidencial fue una carrera muy interesante y controversial entre los tres principales partidos políticos. Andrés Manuel López Obrador del PRD contendió otra vez. El PRI entró en la carrera presidencial con un nuevo candidato, Enrique Peña Nieto, un rostro fresco, status en el espectáculo (su esposa es una actriz mexicana famosa), y un gran historial como gobernador reciente del Estado de México – con su capital, Toluca, una ciudad cercana a la Ciudad de México. El PAN lanzó la primera mujer candidata de México, Josefina Vázquez Mota. Sin embargo, el desempeño de presidente en turno y el conflicto en su partido dañaron su perfil como candidata.
México es la segunda economía más grande en América Latina, sin embargo, la desigualdad de ingresos en México sigue siendo un problema debido a la escasez de puestos de trabajo, los bajos salarios y el subempleo. Aunque Calderón fue un defensor de las políticas de conciencia ambiental con leyes como la Ley General de Cambio Climático aprobada en junio, o políticas para llevar al incremento los precios del gas en México a nivel internacional, y tornando más de 5.500 espacios abandonados en espacios públicos funcionales, su más alta prioridad económicas ha sido la reducción de la pobreza y crear puestos de trabajo.
Con el nuevo presidente de México quien asumió cargo en diciembre, muchos se están preguntando qué es lo que le espera al país ahora que Peña Nieto está en los Pinos-La oficina del presidente de México. Muchos especulan acerca de que si Nieto continuará apoyando la recién aprobada ley de cambio climático y los compromisos de reducir los gases de efecto invernadero en un 30% desde el año 2000,o permitir subsidios al gas para gradualmente disminuir los precios para alcanzar precios internacionales, o permitir más inversión privada que vaya hacia PEMEX para posibles nuevos descubrimientos de yacimientos de petróleo en el Golfo de México.
Cerrar la brecha de la desigualdad de ingresos sigue siendo un gran reto, el presidente necesitará también señalar el crecimiento exponencial de vehículos privados por las calles de México, facilitado por una clase media en expansión. En 2011, el número total de vehículos en el país aumentó en un 11%, lo cual indica que si tasas similares de crecimiento continúan el valor de un vehículo de México se duplicará en 7 años. Si bien el Plan Nacional de Infraestructura de Calderón de $ 233 mil millones de pesos destinado para el mejoramiento y aumento de bienes en infraestructura así como la creación de más puestos de trabajo para evitar la migración hacia el exterior, principalmente a Estados Unidos, los esfuerzos para aumentar las opciones de movilidad y reducir las emisiones locales de gases de efecto invernadero en su mayoría siguen siendo cuestiones locales de la ciudad.
Debido a las tendencias actuales en el crecimiento vehicular el cual traerá también externalidades negativas como congestionamientos incrementados y una degradación ambiental, por ello, el gobierno nacional necesita dar más apoyo a las ciudades para señalar la creciente demanda de transporte. Durante el mandato de Nieto, el continuo crecimiento económico dependerá en incrementar el acceso y mitigar la contaminación y hacer un llamado para las políticas nacionales de transporte sustentable que apoyen con más inversión en la infraestructura pública de transporte y en una transición hacia vehículos más limpios tanto en tecnología del vehículo como en apoyo en infraestructura. Los Pinos y sus asesores políticos deben tener en cuenta que su lucha contra la pobreza y las iniciativas de desarrollo económico necesitarán ser apoyadas por grandes políticas de transporte para conformar la prosperidad económica de México.